Candidatos anticipados: ¿de dónde sacan todo ese dinero?

Por: Eduardo Rodríguez

Ricardo Mejía Berdeja y Luis Fernando Salazar, dos de los tres precandidatos de Morena a la gubernatura, están enfrascados, desde inicios de julio de este 2022, en una feroz contienda, lo cual es ilegal en sentido estricto, porque están fuera de tiempo, pero lo que más llama la atención es de dónde están sacando fuertes cantidades de dinero para pagar toda una campaña publicitaria, pero además la movilización de gente y toda una estructura política activada para el proselitismo.

Desde su campaña por la presidencia municipal de Torreón, que perdió en lo que fue todo un embrollo rocambolesco, Luis Fernando Salazar está gastando millones de pesos, los cuales no están registrados oficialmente. ¿De dónde proviene todo ese dinero? Tiene ciertamente algunas relaciones con empresarios y comerciantes importantes de la región lagunera, pero nadie da a cambio de nada.

Están gastando en anuncios espectaculares colocados por todo el estado, en propaganda de internet a escala masiva; tienen equipos de gente trabajando en la realización de “encuestas” y campañas telefónicas; pagan toda una estructura de gente para movilizar acarreados a eventos y para la elección de los consejeros estatales del partido, que fue por cierto un desaseo vergonzoso.

Gastan en el desplazamiento de su gente por todo el estado con propósitos de proselitismo y nadie puede explicar de dónde sale el dinero, porque no paran de gastar y lo seguirán haciendo hasta que no se resuelva la designación de la candidatura.

Luis Fernando Salazar viene de una familia de recursos económicos, pero tampoco son poseedores de una fortuna que les permita hacer despilfarros semejantes.

Ricardo Mejía Berdeja tiene aun más complicado explicar de dónde está obteniendo el dinero para financiar su precampaña, porque si bien es cierto que no vive al día, el único ingreso conocido del subsecretario de seguridad proviene de su sueldo, de donde sale básicamente para la manutención de su familia. Patrimonio importante no tiene, por lo menos eso es lo que se desprende de sus declaraciones patrimoniales. ¿Entonces de dónde sale todo el dinero que se está gastando?

Desde hace dos meses, antes de que se desataran las precampañas, Carlos Loret de Mola había publicado que la campaña de Morena a la gubernatura se pagaría a partir del negocio sucio del carbón, en el norte del estado, lo que explicaba inclusive el por qué se había atraído a Morena a Jorge Luis Morán.

Es un hecho que hay gente muy visible de Morena en la región carbonífera, que está siendo beneficiada a través de una red de tráfico de influencias que tiene su origen en la Comisión Federal de Electricidad, CFE, así que es una línea de investigación para dar con el flujo de dinero que está financiando todo este gasto, que no parece tener límite alguno.

El único que ha mostrado un comportamiento más sensato a sido el empresario Armando Guadiana Tijerina, que aparece como puntero en las encuestas de preferencia y quien, muy rico como es, sí tiene la capacidad de financiarse una precampaña por todo el estado, pero lo considera innecesario.

Guadiana Tijerina ya realizó una campaña por la gubernatura y una por la presidencia municipal de Saltillo, ambas las perdió, pero eso le convirtió en el personaje más conocido de Morena en el estado de Coahuila, quien además tiene relaciones sobradas en la ciudad de México.

El empresario minero considera que las precampañas que se realizan ahora son innecesarias, y es muy probable que lo diga porque no se toma en serio, con toda razón, que la candidatura de Morena al gobierno de Coahuila se vaya a decidir por una encuesta y, si fuera así, él la ganaría.

Ligero de carácter como es, Armando Guadiana se toma las cosas con buen ánimo y se ha mantenido al margen de esa contienda feroz que se traen sus camaradas de partido y, en este y en todos los demás casos, habrá que creer en eso de que más sabe el diablo por viejo que por diablo.