Breaking

Ricardo Mejía Berdeja, la mutación del ‘Bebesaurio’

Análisis Político y Social / Slider / 30 noviembre, 2020

Por: Eduardo Rodríguez

Al dejar la Secretaría de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, el sonorense Alfonso Durazo sugirió como su sucesor al Subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía Berdeja, pero la presidencia de la república optó por otra designación, bastante controvertida por cierto, lo que no evitó que en el medio político de Coahuila llamara la atención la posición que ocupa Ricardo Mejía, un político priista, originario de Torreón, quien se fue del estado prácticamente desahuciado en el 2005, pero ha reaparecido en el gabinete de Andrés Manuel López Obrador, en un cargo del todo inesperado.

Ricardo Mejía inició una carrera política precoz dentro del PRI en Coahuila donde se convirtió en diputado local cuando apenas tenía 26 años de edad, pero ya ostentaba el estilo y las formas de los viejos políticos priistas, lo que motivó que la prensa, en particular los caricaturistas, le colocaran el mote de “El bebesaurio”.

Del 1995 al 1997 fue Secretario General de la CNOP en el estado de Coahuila y en el 1999 se suma a la campaña de Enrique Martínez y Martínez como gobernador, lo que le permite integrarse a una camarilla política denomina como “la burbuja”, que era dirigida por el Secretario General de Gobierno, Raúl Sifuentes Guerrero, de quien Mejía Berdeja se convierte en uno de sus más cercanos colaboradores por todo el sexenio, como Coordinador de Análisis y Prospectiva Política, un trabalenguas de nombre bajo el cual se realizaban tareas de “inteligencia política”, pero, más específicamente, el trabajo sucio para que Sifuentes Guerrero pudiera postularse en 2005 como el candidato del PRI a la gubernatura.

Por esas cosas de la política, Raúl Sifuentes Guerrero, se obsesiona con ser candidato a gobernador, cuando había llegado a Secretario General de Gobierno por más suerte que méritos, pero al no ser designado candidato en 2005 lanza una campaña personal en todo el estado, pasándose por alto al propio Enrique Martínez y Martínez.

Al final, y para desgracia del estado, es designado candidato Humberto Moreira Valdés y pasa lo que ya es de sobra conocido.

Viendo que la postura de su líder era insostenible, la mayoría de los integrantes de la llamada “burbuja” se suman a la campaña de Humberto Moreira, pero Ricardo Mejía Berdeja no y, lo que le costaría muy caro, se dedica a realizar el trabajo político sucio para Raúl Sifuentes.

Ya electo gobernador Humberto Moreira, Ricardo Mejía Berdeja también abandona a un derrotado Raúl Sifuentes y solicita, tragándose el sapo, trabajo en el nuevo gobierno, pero había hecho cosas que aún para un personaje del pragmatismo de Humberto Moreira eran inaceptables y lo rechaza.

A sus 37 años Ricardo Mejía Berdeja se queda, literalmente, en la calle y en la desgracia, sin tener más oficio que el de la política. Entra en una crisis no solo profesional sino también personal, que afectaría a su familia.

Sin tener ninguna posibilidad en Coahuila se traslada a la Ciudad de México y se incorpora al partido Convergencia, que pasa a ser Movimiento Ciudadano, todo esto en el mismo 2005, dejando atrás al PRI y a Coahuila.

Debió pasar años difíciles, “picando piedra” en su nuevo partido, pero encuentra un nuevo padrino político en la persona de un político guerrerense veterano, Luis Walton Aburto, de quien se convierte en un estrecho colaborador y protegido.

DE COAHUILENSE A GUERRERENSE

Se traslada a vivir al estado de Guerrero, más específicamente al puerto de Acapulco, y se involucra a fondo en la política del conflictivo estado sureño, “talachando” política y electoralmente para Luis Walton, quien llega a ocupar la dirigencia nacional de Movimiento Ciudadano y la presidencia municipal de Acapulco, entre otros cargos.

Ya con 44 años, le llega a Ricardo Mejía un segundo aire, bastante mejor que el de sus años juveniles en Coahuila: logra ser diputado federal por Movimiento Ciudadano de 2012 a 2015 y se convierte en guerrerense, donde inclusive contrae un segundo matrimonio.

En el mismo 2015 logra ser designado como diputado local para el Congreso de Guerrero por el periodo de 2015 a 2018.

En 2018, junto con Luis Walton Aburto, un político ya de 70 años, se suman a la campaña de Andrés Manuel López Obrador con bastante éxito, lo que le permite a Mejía Berdeja dar el salto a su tercer partido para convertirse nada menos que en Subsecretario de Seguridad Nacional, un cargo para el cual no está debidamente preparado, aunque ahora como guerrerense vive en uno de los estados más inseguros del país.

Ya con ese cargo, este año hace su aparición en varias de las conferencias “mañaneras” de AMLO, para hacer declaraciones en torno al conflicto del agua en el estado vecino de Chihuahua, haciendo acusaciones temerarias y conjeturas cargadas de perfidia en contra de los políticos y agricultores chihuahuenses.

Molesto, el gobernador de Chihuahua, Javier Corral, se refirió a Mejía Berdeja como el “porro mediático” de AMLO, quien estaba realizando, nuevamente, un trabajo político sucio por encargo de Alfonso Durazo, su jefe todavía, quien ha dejado el cargo para buscar la gubernatura de Sonora, un estado aquejado por el problema de la inseguridad desde hace por lo menos 10 años, así que Alfonso Durazo va a una aventura incierta y riesgosa.

A sus 52 años, Mejía Berdeja, quien fuera un “bebesaurio” del PRI y luego un operador de trabajo político sucio para Raúl Sifuentes Guerrero, también dentro del PRI, tuvo que sufrir toda una mutación para rehacer su carrera dentro del partido Movimiento Ciudadano, pero ahora, en lo que es otra mutación, se ha convertido en morenista y ocupa un cargo muy delicado, donde, una vez más, parece estar dedicado a hacer el trabajo sucio en contra de los enemigos de la 4T, oficio que aprendió durante su militancia priista en Coahuila y de la mano de Raúl Sifuentes Guerrero, un político que se perdió del escenario regional y estatal y hoy, a sus 62 años y dentro del partido Movimiento Ciudadano, parece seguir condenado a lo que en la práctica resulta un retiro involuntario, después de quedarse anclado en la contienda de 2005, de la cual han transcurrido ya 15 años.

Comentarios de Facebook

Etiquetas: ,



Redacción




Previous Post

¿Cómo será la aplicación de la vacuna para Covid-19?

Next Post

El PAN retrocedió 20 años en el Congreso Estatal





You might also like


More Story

¿Cómo será la aplicación de la vacuna para Covid-19?

Por: Álvaro González Por decirlo de forma suave, la aplicación de la vacuna en contra de la influenza ha sido dificultosa...

30 November, 2020